La cruz no ha dejado de ser un método de tortura del imperio romano. Muchos murieron y sufrieron. Lo mencionado antes hace que la muerte de Jesús halla sido igual o semejante a los demás. Lo que hace diferente no es en la forma de morir ni de tortura, sino lo que sucedió al tercer día: la resurrección. Sin la resurrección no existiría la esperanza de vida eterna. Ante tal pensamiento, me niego a celebrar una muerte cuando lo más importante es que existe alguien que venció la muerte...
Datos de quien escribe
- Ernesto Sánchez
- Naguabo, Puerto Rico
- Mi vida tiene un peso que solo yo puedo cargar...
jueves, 9 de abril de 2009
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2 comentarios:
Creo que ambas guardan importancia. E imagino que tu punto va a que muchos se enfocan en la muerte olvidando la otra parte... la gloriosa resurrección. Para mí la importancia de la muerte no es la muerte misma sino que Él se DIO... Él pagó nuestra deuda.
Por eso me ama el Padre, porque YO PONGO MI VIDA, para volverla a tomar. Nadie me la quita, sino que YO DE MÍ MISMO LA PONGO. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.
Y como bien dices... el hecho no culmina en haberse dado por nosotros... el hecho de haberse dado por nuestros pecados hace nulo cualquier "sacrificio" que podamos TRATAR de hacer para ganar lo que ÉL pagó. La maravillosa resurrección nos GARANTIZA la vida eterna. Celebro que resucitó para que tuviéramos VIDA ETERNA... Cuan hermoso es ÉL.
Te invito a ver cada uno demis blog,en ellos verás el reflejo de Dios,pero en especial LAS HADAS EN LAS HESPERIDES lee los ultimospoemas de mi abuelo Raul que he puesto y NOS NECESITAN como el hombre sigue siendo cruel con los seres sin voz..Graciaspor compartir tán gran blog.Con cariño Victoria.España
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